Siempre he pensado que esa frase es uno de los mejores halagos que se le puede hacer a una persona.
Porque uno puede gustarle muchas cosas, puede saber que algo es bueno y aún así no gustarle (como me sucede con Poniatowska), porque igual y te pueden gustar las cosas aunque sean malas y tu te niegues a aceptar sus defectos (¿alguien dijo PRD?), pero cuando se es fan de verdad se aceptan tanto los defectos como virtudes, saber cuando a pesar de no ser excelente eso basta (como the killers, ya sabían que lo iba a decir, ni se hagan).
Una vez Master me dijo que era fan de las cosas que escribía en mi blog y me hizo muy feliz, y aunque algunos de mis amigos piensan que me estoy burlando de ellos cuando por alguna razón digo que soy fan suyo, es una de las pocas veces en las que soy sincero.
El día que cumplí veinte años (no hagas chistes Zanahoria) me compre a manera de regalo, el segundo disco de The Libertines, homonimo, muchos pueden que no identifiquen a la banda (al menos que suelan seguir los chismes en las secciones de espectaculos de los periodicos, donde facilmente se pudieron haber dado cuenta de los problemas del ex vocalista de la banda, en compañia de Kate Moss, drogas y alcohol), pero seguro vieron ese comercial de la universidad axe donde de fondo utilizaban una de sus canciones, don't be shy. Bueno, pues dicha canción viene en este disco, junto con otras mas e igual de buenas.
Abre de buena manera con esa canción muy a la me-fui-ya-no-me-tienes-jodete, de Can't stand me now, con ese solo final de armonica tan heroico, le sigue con la punketa the last post in the bugle, después llega la sincopada y harto comercial don't be shy, con su bajo t bateria amarrados al unisono, la manera en la que canta Doherty hace imposible pensar otra cosa que no sea el hecho de que esta borracho, lo que va perfecto conn el mood de la canción.
Hay que decir que en todo el disco asoma un espiritu punk, pero no marginal musicalmente, sino de exponer de frente y directamente las ideas, con un ligero toque a the clash y hasta ska (ingles de los ochentas, obvio, no la cosa que en México se tiene entendida como ska), lo cual no es de extrañarse si tenemos en cuenta quien esta a cargo de la producción, la cual es buena, casi minimalista, recalnando solo lo que se tiene que notar, que en la mayoria de los casos es el juego de voces en las armonias. Por decirlo de una manera, el disco es crudamente amigable, eso con lo que miles de bandas punks arlededor del mundo sueñan, algo que se pueda pasar por la televisión, pero sin restarles valor.
Sigue la oscura tha man who would be king y la popera, music when the lights out, acompañada de un ligero, pero penetrante lick por toda la canción.
Tanto en las vocales, como en la guitarra hay un juego constante entre Pete y Carl, el bajo esta siempre presenta y la bateria a pesar de no ser virtuosa, hace muy bien su trabajo, preciso y con ritmos no convencionales.
Después siguen un grupo de canciones punk, rapidas y divertidas, con excepción de la tierna what katie did y sus coros de juguete. En varias de ellas se hace presente su ideologia anti facista, propaganda que extendían en sus conciertos.
Road to ruin, la penultima, se descose con unos teclados que parecen salidos de algún disco de the doors, lo cual solo muestra la versatilidad del conjunto.
El disco termina con la que se ha vuelto una de mis canciones preferidad. No se que tiene, puede que sean esos coros de llamada respuesta (it's important to you, it's important to me), esa linea de guitarra sencilla, pero punzante, o solo esa historia de juventud.
La juventud, amigos, alcohol, un corazón roto; si, me encanta.
En realidad me encanta.
Y el video, con esa ultima toma de Carl y Pete como los amigos que fueron, creo que no me emocionaba tanto desde cuando vivía solo y esuchaba brown sugar solo para mandarle mensajes a mi hermanita diciendole que la extrañaba mucho. Les dije, soy un cursi.
What became of the likely lads? what became of the dreams we have? what became of forever?
Después vendrían los problemas de drogas, los conciertos cancelados y la desintegración, el primer disco de los arctic monkeys, pero nos quedamos con este disco, que como decían en el conteo de lo mejor del año en la revista sonika (en ese ya lejano 2005): Aunque ese fuera el ultimo disco que sacara la banda, con eso bastaba quedarse en la historia.
Siempre he pensado que de hacerme un tatuaje, en mi top de opciones estaría ese que tiene Carl en su brazo con el nombre de su banda.
Si un día me encuentro a Pete Doherty o Carl Barat, lo unico que se me ocurre para decirles es. yo soy tu fan.
Después talvez llore de emoción.
(Abajo: La portada del disco edición especal, con un dvd lleno de extras, como canciones en vivo, videos, entrevistas y documentales ,que en México se atrevió a sacar Noiselab; después viene el arte del disco que corresponde a la letra de la canción y por ultimo el video, con niños tomando, comportandose como buenos ingleses y una buena canción)
El Sr. Lado Brillante posted a photo:
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